Se da una detallada explicación de varios ejercicios de estiramientos para llevarlos a cabo antes de iniciar la práctica deportiva propiamente dicha.
Cualquier practicante de deportes, sin importar cuál sea, conoce de memoria la necesidad imperativa de hacer ejercicios de calentamiento anteriores a la práctica deportiva propiamente dicha, para hacer que los músculos entren en calor y logren estar preparados suficientemente al momento de la práctica real. En el caso de los deportistas que participan en competencias, el tiempo de calentamiento previo les ayuda a tener una mayor concentración.
De todas maneras y así la persona solo sea un practicante deportivo de carácter aficionado, también debe hacer un precalentamiento, con el fin de tener un mayor y mejor desempeño, pero además con el fin de evitar lesiones musculares que pueden presentarse cuando se exige a los músculos dar su mayor esfuerzo de una sola vez.
El calentamiento como preparación debe durar por lo menos 10 minutos para desentumecer los músculos y para que todo el organismo encuentre un tono apropiado de funcionamiento. Lo más aconsejable es realizar los movimientos lentamente, durante la mañana y en lo posible, este calentamiento debe durar un poco más para personas mayores de 55 años y debe hacerse con cuidado y bajo supervisión médica para quienes se están recuperando de lesiones o de accidentes.
Para hacer que los glúteos y la espalda entren en calor, puede hacer el siguiente estiramiento, estando de pie, incline su cuerpo hacia adelante manteniendo las rodillas ligeramente flexionadas y en esa posición, estire los brazos y las manos y muévalas para que suelten las tensiones y trate que las manos se acerquen lo más posible hasta tocar los pies. Debe intentarse bajar lo más cerca posible, casi hasta tocar el suelo. Cuando ya haya conseguido estirar lo más posible, permanezca en la posición y cuenta hasta 15 muy despacio.
Para volver a estar recta y de pie, debe subir muy despacio para que no vaya a sentir mareo al subir de una sola vez y rápidamente. Suba despacio y recupere la posición de la espalda recta por unos segundos. Haga unas respiraciones profundas, inhalando y exhalando con calma para que su cuerpo se recupere.
Para calentar los muslos por la parte interior, siéntese con las plantas de los pies juntas y perfectamente bien apoyadas en el suelo, manteniendo las rodillas hacia adelante y unidas, sin permitirles que abran hacia los lados. Manteniendo esa rigurosidad, acerque lo más que puedas los pies hacia la ingle y empuje suavemente las rodillas hacia abajo. Cuenta hasta 15 lentamente y repita por lo menos 20 veces.