Consejos para el frío y la gripe

?ltimamente el frío se ha convertido el el protagonista en algunos lugares y es que se ha vuelto tan fuerte que a muchos no saben como poder regular la temperatura de su cuerpo. lo bueno es que la alimentación puede llegar a jugar un papel importante para aportar calorías al cuerpo sin necesidad de subir de peso. Consejos para el frío y la gripe Hay algunos lugares que por su ubicación son excesivamente fríos y otros que por los cambios en las estaciones y por el daño en la capa de ozono, empiezan a sentir una temperatura más baja de lo normal y las personas no saben como controlar estas condiciones y mantener su cuerpo con una temperatura regularizada y no muriéndose de frio. No obstante hay que encontrar elementos que beneficien las defensas, que refuercen el sistema inmunológico y sea más seguro evitar enfermedades como la gripe o los resfriados. Entonces se hace necesario un cambio en la alimentación, pues es desde allí de donde se obtendrán la mayoría de elementos como vitaminas, minerales y otros componentes que fortalecerán el cuerpo y de paso ayudaran al cuerpo a mantenerse caliente o por lo menos que se adapte más fácilmente a los cambios en el ambiente. 

Lo primero es que hay que empezar a consumir alimentos calientes, que no tengan tantas calorías y que ayuden a saciar el estomago, por ejemplo, las sopas. También es necesario que consuman por lo menos dos porciones de verdura al día más otras dos de frutas, para empezar a hacer refuerzos en las defensas. Las papas son una solución muy innovadora, por que las preparaciones pueden ser diversas y el resultado para la temperatura puede ser importante, además que se deja atrás aquello dl mito que las papás solo hacen subir de peso.  

El agua también cumple su función, porque al beberla regularmente las mucosas se mantienen hidratadas y si por casualidad se presenta un resfriado, se pueden expulsar más fácilmente los residuos. Hay ciertos alimentos que deben ser limitados en su consumo, como los productos de panadería elaborados con harina blanca, los frutos secos con exceso de sal, los productos en conserva o verduras fritas, así la leche entera y los lácteos ricos en grasa. El café y las gaseosas también deben quedar en el olvido al igual que las margarinas o productos con grasas saturadas, sobre todo las animales. 

Los que si pueden llegar a funcionar perfectamente son en su mayoría vegetales, pues ayudaran a que los síntomas de una gripe se desvanezcan mas tapidamente, por ejemplo el ajo, la cebolla, la col y los puerros, porque ayudan a descongestionar, desinflamar, aportar vitaminas A, C y D y aportar antibióticos naturales. La miel, el polen y la piña también ayudan a minimizar los síntomas y de paso aportar suficientes calorías para que la energía se asimile rápidamente en el cuerpo y empiece a sentirse caliente.