La flexibilidad no es la misma para todas las personas pero pueden haber ejercicios que ayuden a relajar los músculos aunque es bueno saber como y cuando realizarlos. A muchas personas les pasa que mientras realizan ejercicio pueden darse cuenta que tienen un porcentaje muy bajo de flexibilidad mientras que quienes están a su lado se mueven de tal manera que parecen muñecos de plástico. Lo importante es tener en cuenta que este aspecto puede cambiar desde que haya disciplina al realizar ejercicio que permita que los músculos se relajen y se puedan realizar no todas pero si la mayoría de posturas que muchas veces no se pueden lograr. Aunque también hay que analizar el largo de las extremidades y el funcionamiento general del cuerpo.
Antes que nada hay que realizar estiramientos no solo para obtener la anhelada flexibilidad y agilidad muscular sino que con ello se evitan calambres, fatigas, lesiones y deficiencias circulatorias. Una vez realizados los movimientos de calentamiento se inician los movimientos de elongación que se caracterizan por ser lentos y coordinados manteniendo un control de la respiración. Para lograr el objetivo deben hacerse rutinas que pueden contemplar días o meses pues un estiramiento no se lograra de un día para otro.
Cuando se inicia las repeticiones son de mínimo 20 y el tiempo de mantenimiento de cada uno puede ser entre 25 y 30 segundos. Esto se hace para que se sienta cierta tensión en el musculo pero que sea soportable y no cause dolor o molestias. También hay que tener en cuenta la alimentación pues hay ciertos alimentos que ayudan a la fibra muscular pero otros resecan los músculos e impiden el movimiento en medio de una práctica deportiva. Para ayudar a la masa muscular, los tendones y cartílagos es bueno consumir proteínas y calcio, específicamente carnes como la de pollo y lácteos respectivamente. Esto ayuda a fortificar huesos y a aumentar la producción de colágeno.
Se puede complementar con frutas, verduras y mucha agua para reforzar el cuerpo con las principales vitaminas. Como todo proceso hay ejercicios apropiados para principiantes que ayudaran a que poco a poco se libere la tensión muscular y la flexibilidad sea mucho mejor por ejemplo el estiramiento de hombros y brazos, rotación del cuello y pies, intento de tocar los pies con las manos y rotación general de la cintura y cadera.
Recomendaciones para evitar riesgos
La frecuencia es vital pues como todo, los excesos son malos y más cuando se está iniciando y aprendiendo. Es bueno realizarlos antes y después de una rutina de ejercicio común y si por razones laborales o responsabilidades en el hogar no se pueden realizar, se pueden realizar en repeticiones de 20 o si es posible 15 minutos 3 veces por semana. Si se han sufrido operaciones o cirugías es mejor pedir orientación acerca de los tipos de ejercicios que se pueden realizar para no sufrir complicaciones. También hay que hacer un siempre calentamiento antes de realizar los estiramientos, pues se pueden dañar los músculos o generar dolores.