Que hacen bien no hay dudas pero, un tipo es mejor que otro? Veamos algunos consejos para elegir el fruto seco que más nos convenga
Hasta hace algún tiempo acusado de ser muy calóricos, nueces, pistachos, almendras y similares ahora son más conocidos por los beneficios para la salud ocultos en ellos, que por la cantidad de calorías que aportan en la dieta diaria.
Entre las características nutricionales más importantes de las frutas secas, encontramos su contenido de ácidos grasos omega 3, y por esto están consideradas entre las mejores fuentes de origen vegetal de estos valiosos nutrientes. Los pistachos, sin embargo, pueden ser útiles en la lucha contra la diabetes, mientras que las almendras parecen ser la ideales para un tentempié ya que pueden amortiguar el apetito y, al mismo tiempo, contrarrestar los factores de riesgo cardiovascular y la hiperglucemia.
Entonces, cuál elegir ? Veamos algunos consejos específicos.
Pistachos, cacahuetes y almendras: aliados para bajar de peso
En términos de calorías los diferentes tipos de frutos secos no son muy diferentes entre sí. Algunos, sin embargo, son más ricos en ácidos grasos monoinsaturados. Es el caso de pistachos, cacahuetes y almendras, que parecen ser valiosos aliados en la pérdida de peso.
Un estudio publicado en Nutrition, por ejemplo, ha demostrado que la incorporación de pistachos en la dieta de personas de mediana edad con riesgo de enfermedades cardiovasculares y diabetes, ayuda a perder peso. Sus resultados coinciden con los de otro estudio realizado en la Universidad de Los Ángeles, California.
¿Pero cuál es su mecanismo de acción? Según un estudio publicado en el American Journal of Nutrition, la ventaja radicaría en la sustitución de alimentos menos saludables con estos frutos secos. Eligiendo entonces, pistachos, cacahuetes y almendras, se elige una alimentación más saludable .
Nueces para la salud del corazón
Para proteger la salud del corazón no debería faltar las nueces en la dieta. Varios de los estudios realizados sobre el tema han demostrado que comerlas varias veces a la semana puede reducir el riesgo de ataque cardiaco, muerte súbita cardíaca y enfermedad cardiovascular, en un porcentaje de entre el 30 y el 50%.
Su secreto radica en sus propiedades antioxidantes, pero no sólo. Como se mencionó anteriormente, los frutos secos son una buena fuente de omega 3, ácidos grasos conocidos sobre todo por sus beneficios en términos de salud del corazón y las arterias.
Avellanas y almendras para proteger el cerebro
Las avellanas y las almendras son ricas en vitamina E, nutriente que promueve la buena salud del cerebro. Desde este punto de vista, vale la pena un halago también para lo que generalmente se considera un fruto seco, pero que en realidad son legumbres: el cacahuete. Todos ellos contienen buenas cantidades de vitamina E, y también otros nutrientes importantes para la salud del cerebro: vitamina B3 y, sobre todo, vitamina B9.
También conocida como ácido fólico, la vitamina B9 contrasta la pérdida progresiva de las neuronas, lo que ayuda a contrarrestar el deterioro cognitivo. De acuerdo con un estudio publicado en el American Journal of Psyquiatry, el folato podría mantener alejada, incluso la depresión.
En cualquiera de los casos, l que realmente importa es no excederse en la cantidad e incorporar los frutos secos en una dieta sana y equilibrada.