El colón irritable se está convirtiendo en un problema tan serio que hasta los niños lo padecen y desafortunadamente tiene que ver con los malos hábitos alimenticios y los pocos correctivos que se tienen a pesar de conocer las causas del problema. 
Es un problema que cada vez se intensifica y es que está ligado a las afecciones del colon y de la incapacidad para asimilar ciertos alimentos y sus componentes. Muchas veces las personas piensan que han subido de peso y que el hecho de que algunas prendas queden ajustadas es porque esos kilos de mas que supuestamente tienen es lo que hace que deban mudar de ropa, pero no es cierto. Lo que sucede es que el estomago vive inflamado y las molestias son constantes, porque además del volumen que gana el abdomen, se evidencias problemas para ir al baño ya sea por estreñimiento o soltura o por excesivas flatulencias y retención de líquidos.
Antes de empezar a hacer cualquier tipo de dieta para bajar de peso, hay que asegurarse que no sea un problema de alimentación y relación con el colon y si es esto, encontrar y practicar las maneras de controlarlo. Lo primero que hay que tener en cuenta es saber comer, que comer, como comer, donde y a qué horas. Lo que es permitido comer son cierta frutas y vegetales que pueden ayudar a minimizar el problema, por ejemplo, la piña, que ayuda a eliminar o evitar los gases, mejora la digestión y quita la inflamación. El yogur con probióticos aporta agentes benéficos para el estomago y el intestino, lo que lo mantiene equilibrado y con un buen funcionamiento. Las algas son excelentes para el sistema digestivo, así que comerlas en forma de sushi es recomendable, pues limpia el cuerpo de toxinas y mejoran considerablemente el metabolismo. Una cucharadita de ajonjolí en algunas comidas puede funcionar para limpiar el hígado mientras que el jengibre, es bueno tomarlo en té o rayado.
Con respecto a las bebidas, es bueno consumir tés, ya sea de manzanilla para que la inflamación baje y el estomago se sienta mejor, de amargón para evitar los gases o un té verde para mejorar los síntomas. Lo que queda prohibido comer son los granos, los panes blancos porque no tienen fibra sino gluten empeorando el problema, las grasas, los frutos secos y las comidas irritantes. Lo que está prohibido tomar son las gaseosas, el alcohol, bebidas ricas en azúcar, café o chocolate. Funcionan mejor la avena, el pan integral, las frutas, el cereal y algunas semillas.
Es bueno consultar a un médico o un nutricionista para que evalúe cuales son las mejores alternativas, pero siempre y cuando se sigan al pie de la letra, porque el colon queda propenso a irritarse tan pronto sienta alguno de los alimentos que no asimila y por ende produzca inflamaciones y molestias.
